El aceite de magnesio ha ganado popularidad como una alternativa natural y eficaz para cubrir las necesidades de magnesio del cuerpo sin necesidad de ingerirlo en cápsulas o comprimidos. Pero ¿es realmente efectivo? ¿Qué beneficios ofrece y cómo se usa correctamente? Aquí te lo contamos todo.
¿Qué es el aceite de magnesio?
Aunque se le llama “aceite”, no contiene aceites vegetales. El aceite de magnesio es una mezcla saturada de cloruro de magnesio y agua destilada, que al mezclarse forma una textura aceitosa sin ser grasosa. Se aplica sobre la piel y se absorbe directamente a través de los poros.
Propiedades del aceite de magnesio
El magnesio es un mineral esencial que participa en más de 300 reacciones bioquímicas del cuerpo. El uso tópico de este mineral ofrece múltiples beneficios:
- Relajación muscular: ideal para personas con contracturas, calambres o fatiga muscular.
- Mejora del sueño: puede ayudar a conciliar el sueño más rápido y tener un descanso más profundo.
- Reducción del estrés y la ansiedad: el magnesio regula el sistema nervioso y puede mejorar el estado de ánimo.
- Alivio del dolor articular: útil para personas con artritis o molestias crónicas.
- Mejora de la piel: algunos usuarios reportan mejoras en condiciones como psoriasis o acné.
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Cómo se usa el aceite de magnesio
- Aplicación directa: Rocía de 5 a 10 pulverizaciones en piernas, brazos, abdomen o espalda. Masajea suavemente.
- Tiempo de actuación: Déjalo actuar al menos 20-30 minutos antes de enjuagar si lo deseas (aunque no es necesario).
- Frecuencia: Puede usarse diariamente, especialmente después del ejercicio o antes de dormir.
- Precauciones: En pieles sensibles puede generar un leve picor o escozor las primeras veces. Si es así, diluye la solución con más agua o aplícalo en zonas menos sensibles.
Cómo hacer aceite de magnesio casero
Prepararlo en casa es muy fácil y económico:
Ingredientes:
- 1/2 taza de cloruro de magnesio en escamas (lo encuentras en herbolarios o tiendas online).
- 1/2 taza de agua destilada.
Preparación:
- Calienta el agua destilada sin que llegue a hervir.
- Añade el cloruro de magnesio y remueve hasta que se disuelva por completo.
- Deja enfriar y vierte en un frasco con pulverizador.
Se conserva a temperatura ambiente por varias semanas.
Uso recomendado:
- Aplicación tópica: Se recomienda aplicar entre 5-10 pulverizaciones del aceite de magnesio en áreas como los músculos o las articulaciones. Puedes usarlo en el abdomen, piernas o espalda. Deja que se absorba por unos minutos.
- Frecuencia de uso: Puedes usarlo entre 1-2 veces al día, preferiblemente por la noche, ya que el magnesio tiene un efecto relajante que puede ayudarte a dormir mejor.
¿Aceite de magnesio o magnesio oral? Comparativa
| Característica | Aceite de magnesio (tópico) | Magnesio oral (comprimidos o polvo) |
|---|---|---|
| Absorción | Alta (transdérmica, evita el sistema digestivo) | Buena, aunque puede variar por persona |
| Efectos secundarios | Raro, leve picor en piel | Diarrea o malestar digestivo en dosis altas |
| Efectos sobre músculos | Muy rápido | Más lento |
| Ideal para | Dolor muscular, insomnio, estrés | Deficiencias generales de magnesio |
| Facilidad de uso | Aplicación diaria, rápida | Requiere constancia y buena absorción intestinal |
Conclusión: Ambos formatos son útiles, pero si tu problema es muscular o de descanso, el aceite puede darte resultados más inmediatos. Si tienes deficiencias comprobadas, la forma oral puede ser necesaria.
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